Adaptación, palabra que Darwin acuñó cuya vigencia es más fuerte que nunca. La aparición de Internet generó una carrera cada vez más rápida que obliga a seguir constantemente las tendencias digitales.
La competencia es agresiva y con muchas variables, entonces, conseguir el éxito es una tarea diaria y difícil.
Los expertos saben que ser flexibles ante las necesidades de los consumidores y adaptarse a los dispositivos es la clave. Por ello, los desarrolladores web deben centrarse esencialmente en ello, usando a su favor la eficiencia y la intuición.
Ya se apuntaba a tener todo al alcance desde el hogar, pero con la pandemia eso se profundizó más.
Las tiendas online, las noticias actualizadas, la conciencia social y ecológica deben tener contenido y presentación de calidad. Ofrecer algo no basta: las empresas deben participar y demostrar su compromiso e involucramiento con causas sociales para captar usuarios.
Hay que ajustarse a los hábitos del público objetivo, estimularlo a permanecer y generar una conexión directa y profunda con él.
El cliente debe sentir que está siendo asistido y comprendido, que el servicio es exclusivo.
En fin, el usuario es el centro de todo diseño web, haciendo cada vez más real y entretenida la virtualidad.
¿Adaptarse es transformación?
Cambios sociales y nuevas tecnologías impactan en hábitos y comportamientos. Así, aparece el teletrabajo, plataformas online o apps de delivery o de pago.
Adaptación es sobrevivir, pero transformarse es muy diferente.
Adaptación es ofrecer interacción, estímulo visual, servicios automatizados y agilidad. Todo es realidad virtual y aumentada cuya regla es “menos es más”.
La accesibilidad, la rapidez, deben optimizar y mejorar la experiencia del usuario y el tiempo es oro. La adaptación es hacer todo dinámico y dar valor añadido evitando lo superfluo.
Es esencial captar la atención quitando lo abstracto con sombras, luces, gráficos, efectos de animación y 3D.
Además, adaptarse a la configuración del usuario y sus navegadores, con facilidad de uso y carga web veloz es primordial.
También se exige información de calidad, continua, filtrada y relevante para la mejor asimilación de ésta.
En cambio, transformarse es replantear constantemente el negocio estando a la vanguardia. Es cambiar profundamente la mentalidad más allá de lo digital.
Es hacer las cosas distinto, crear valor y definir el certero uso de recursos. Es mejorar, crecer, capacitarse, ofrecer soluciones innovadoras a los desafíos con nuevas tecnologías para ser novedosos y originales.
Sin duda, alguna hoy estamos viviendo un cambio sin precedente como lo establece Borjan en su artículo De la Transformación Digital a la Adaptación Digital.
Por el cual quisimos crear este articulo para ampliar su opinión. Si te ha gustado este artículo te invitamos a visitar nuestro blog aquí